Se prevé que mañana lunes el gobierno del estado de San Luis Potosí informe quien será el nuevo director de la Guardia Civil Estatal tras el inminente cese de José Luis Urban Ocampo.
Podría ser el propio mandatario Ricardo Gallardo Cardona quien en el marco de su Segundo Informe de Gobierno (a desarrollarse en Ciudad Valles) dé a conocer el nombre del titular que llega a la GCE.
La intención de separar a Urban Ocampo del cargo fue concebida por el gobernador desde meses atrás, pues Gallardo es perfectamente consciente de los riesgos que conllevaría mantener al ex militar en la estructura de Seguridad Pública.
No obstante, hubo quienes dentro del primer círculo de poder abogaron por lo indefendible, pero los emplazamientos para que Urban enmendara sus formas (y sus fondos) se agotaron.
En lo menos pensado José Luis Urban Ocampo y sus más allegados dentro de la GCE cometerían un error de consecuencias fatales cuyo costo político no está dispuesto a seguir corriendo el mandatario estatal, menos aún en vísperas de la temporada electoral.
Más allá de los escándalos mediáticos y en redes sociales protagonizados por Urban Ocampo, fueron cada vez más frecuentes, graves y resonantes entre la opinión pública los excesos cometidos en agravio de potosinas y potosinos.
Se ha consignado en video y en transmisiones En Vivo cómo personalmente José Luis Urban Ocampo arremete contra reporteros (as), civiles o manifestantes.
Ello se suma a los desatinados operativos en los que rara vez se captura a delincuentes de importancia mayor dentro de las estructuras criminales.
En general son narcomenudistas los detenidos, o sólo se decomisan armas, vehículos abandonados o dosis de droga, pues los delincuentes han venido burlando sistemáticamente la acción de los oficiales lidereados por los jefes regionales de la GCE.
