Ayer domingo 28 de abril, dentro de las instalaciones del “Colegio Areté” (en la ciudad de San Luis Potosí) se llevó a cabo un partido de futbol entre alumnos de primaria de esa escuela y estudiantes del “Instituto Andes”.

Aparentemente el encuentro deportivo se desarrollaba de manera normal. Sin embargo, los padres de familia que asistieron como espectadores comenzaron a notar agresiones directas contra uno de los menores jugadores del “Colegio Areté”.

Minutos antes, varias madres de familia escucharon que el entrenador del “Instituto Andes” dio indicaciones a los niños que integran el equipo de dirige: “Péguenle, háganle de todo, ataquen al número 27”, refiriéndose al niño del equipo contrario que portaba la camiseta con ese número.

Al finalizar el partido el papá del menor agredido le pidió una explicación de lo ocurrido a Mario Reyes (entrenador del equipo del Instituto Andes), pero el profesor ignoró la petición. Sin embargo, fue testigo una mamá que había escuchado cuando dicho entrenador instigó a sus jugadores a que realizaran la agresión contra el número 27 “contrario”.

En consecuencia, el papá del menor agredido ha presentado denuncia y/o queja ante la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado, ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y ante el propio Instituto Andes. Incluso envió un escrito a la Secretaría de Educación Pública federal.

En los oficios, el padre de familia cuestiona las maneras en que el entrenador de ese Instituto transmite los valores a los alumnos. El padre de familia advierte que la educación y el avance de los niños se construye a base del respeto y la dignidad de las personas.

El padre de familia denunciante dijo confiar en que las autoridades tomen cartas en el asunto y no se repitan este tipo de agresiones que “dejan mucho qué desear de instituciones supuestamente de prestigio”.